El primer mes de 2008 fue el sexto enero más cálido desde 1971, según los datos que aparecen en el último informe de coyuntura del Ministerio de Medio Ambiente. En enero pasado, las temperaturas en la Península y Baleares superaron la media del periodo de referencia (1971-2000) en 1,7 grados centígrados, aunque a cierta distancia de 1966 y 1996, que registraron varias décimas más.
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El mes de enero en Canarias tuvo un carácter de "muy cálido a extremado", salvo en altitudes medias; "cálido", en el litoral mediterráneo, Baleares, Cantábrico central y áreas de la cuenca del Ebro; "normal" en Tarragona, y "frío" en puntos del sudeste peninsular. En el resto del país, predominó el carácter de "muy cálido" y en numerosos puntos del interior se superaron los máximos históricos, como en Ávila, Cáceres, Jaén y Cuenca.
En cuanto a los valores pluviométricos, enero fue ligeramente seco en toda la Península. En Baleares también fue seco y en Canarias, entre seco y extremadamente seco. Ya en febrero, las lluvias caídas aumentaron en 478 hectómetros cúbicos la reserva hidráulica, que a fecha de 26 de febrero se encontraba al 44,6% de su capacidad total, más de 18 puntos porcentuales por debajo de la reserva media de los últimos 10 años.
Respecto a la contaminación atmosférica en áreas rurales, el informe destaca que en diciembre disminuyó el ozono superficial y, en mayor medida, las emisiones de dióxido de azufre (SO2), mientras que aumentaron las de óxidos de nitrógeno. A lo largo de 2007 hubo 343 días en los que se superó el valor objetivo de ozono para la protección de la salud.
El informe indica también que en enero pasado se registraron 770 incendios forestales que arrasaron unas 2.500 hectáreas de terreno, una cifra superior a la media de la última década.
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